En nuestra búsqueda de nuevos sabores, nuevos momentos que compartir con ustedes, nos topamos con otro “lugar secreto” de Palermo.
La Alfarería, es un lugar para conectar con un arte tan antiguo como el lenguaje, no por algo, su origen se lo relaciona con historia antigua. Su nombre simboliza la “tierra cocida”.
El placer de sentir moldear una pieza en tus manos, como todo, requere practica pero es gratificante y relajante.
Fango es un taller de Alfarería que esta ubicado en el barrio de Palermo. Dirigido por Sandra Cibran y Valeria D´onofrio, nos acercaron la propuesta de realizar una clase de “prueba”, la misma esta disponible para toda persona que quiera dar una mirada a este mundo.
Sin mas detalles y con mucho interés llamamos para concretar una cita! Manejan un amplia agenda de Horarios, que facilitan el poder ir en cualquier momento, ya sea de manana o de tarde.
Ya desde que entramos nos encontramos con un lugar impresionante, esculturas de arcilla, algunas hermosas, otras en sus primeras etapas de creaciones, nos invitan a “jugar”, debo decir que me pareció excelente, Fango, esta ubicado en Gurruchaga 1916 (y Nicaragua), a pocas cuadras de Plaza Serrano, y cuenta con un hermoso taller espacioso, totalmente equipado. Cada alumno cuenta con un propio torno, y un espacio donde guardar sus piezas. Luego que nos dieron el recorrido del lugar, ya no podíamos mas! Y calzandonos el delantal, nos dieron un pedazo de arcilla para empezar amasar!
El profesor nos explico como poner las manos, como lograr sacar todas las burbujas de aire, para así evitar que cuando tengamos que tornear la pieza esta no se rompa.
Todos sonrientes, tanto aprendices como ya alumnos mas experimentados, se forma una autentica cofradía de ayuda donde siempre circulan el matecito y los bizochos.
Si bien la primera clase es algo muy inicial e introductorio, ya uno se puede ir dando la idea de lo que es moldear, el como colocar las manos para generar las piezas, donde no es la fuerza ni la presión lo que importa, sino la forma en que uno coloca la mano, y realizar los movimientos lo mas lento posible… dado que el torno gira y la pieza se va amoldando sola.
No les puedo explicar lo que es estar enfrente de una masa amorfa, que de a poco se vuelve un objeto nuevo, transformándose a la mirada de todos. Si, se van a confundir y muchas veces van a tener que volver a comenzar, pero nada que sea facil vale alguna ve la pena.
Y confíen en mi, dense la oportunidad de explorar algo nuevo, y abrir su mente a este lugar.
Luego de una clase muy interesante a descansar a la hermosa terraza, y pausa y charla de por medio, nos invitaron a volver y sorprendernos con las cosas que podemos llegar a crear.
Las clases tienen una duración de 2 horas semanales. Los grupos son reducidos de 10 personas como máximo y cada uno tiene un torno a su disposición.
FANGO
Taller de Alfarería
facebook.com/fango.tallerdealfareria
TEL: 4831-9168
Gurruchaga 1916 – CABA