Crítica de “La Suerte de Los Logan”

Protagonizada por  Channing TatumAdam DriverDaniel Craig, Riley Keough, Katie Holmes, Farrah Mackenzie, Jack Quaid, Brian Gleeson, Katherine Waterston. Dirigida por Steven Soderbergh. Escrita por Rebecca Blunt.

La suerte de los Logan es decididamente mala: a Jimmy (Tatum) lo echaron de su trabajo en una construcción por una lesión pre-existente en su pierna (que además le costó su beca para jugar futbol profesional) no declarada. Su hermano, Clyde (Driver) perdió la mitad de su brazo en la guerra y ahora trabaja de barman en un bar de mala muerte al costado de la ruta. La única que parece haber salido ilesa es Mellie (Keough), que trabaja como estilista en una peluquería y vive haciéndose cargo de la hija de Jimmy, Sadie (Mackenzie).

La película comienza con una voz en off que cuenta la historia de la creación de la canción Take Me Home, Country Roads. Luego, pasamos a un primer plano de Sadie mientras le alcanza una llave de tuercas a alguien fuera de cámara para después un plano general de un hombre arreglando el motor de una camioneta, con una cabaña de fondo. Descubrimos que es Jimmy, con su camioneta de los años 90. La historia parecería ambientada en esa época si no fuese porque Jimmy saca un celular viejo que usa sólo para sacarle fotos a su hija.

La película es muy característica de Soderbergh, con humor negro por todos lados, que puede llegar a herir ciertas sensibilidades, pero en caso de haber disfrutado de Magic Mike (la uno, por lo menos) podrán disfrutar de esta película. Tiene ese humor ácido donde los personajes dicen cosas graciosas con expresión seria, lo que solo refuerza el chiste. El absurdo es un recurso recurrente y efectivo, que combina muy bien con lo grotesco y paródico de los personajes.

Muy buen uso de los planos desenfocados para generar tensión y luego el enfoque para develar el misterio: un ejemplo de esto es una escena donde el plano esta desenfocado mientras Jimmy le dice a su ex mujer que le va a sacar la tenencia de Sadie, su mujer le contesta que con qué dinero lo va a hacer, para pasar a un plano general de la mansión donde ella vive, una comparación  directa con la cabaña de Jimmy.

En el reparto, se destaca la participación de Seth Macfarlane (mejor conocido por su labor en Padre de Familia) como Max Chilblain, un corredor de autos muy famoso que es sumamente desagradable con aquellos que no son celebridades. También sorprenden las actuaciones de Jack Quaid (mejor conocido por su papel en Los juegos del hambre) y Daniel Craig, en personajes grotescos que mucho distan del seductor James Bond.

La ambientación es muy típicamente sureña de West Virginia, esto se ve especialmente en el bar donde trabaja Clyde, con animales embalsamados, rockolas con música country y carteles luminosos de marcas de cerveza muy noventosos. La música también ayuda con esta ambientación: con éxitos de Creedence Clearwater Revival como Fortunate Son, temas de Loretta Lynn y LeAnn Rimes.

En un principio, la película parece otra gastada a los blancos estadounidenses sureños de pocos recursos (o white trash) y a su cultura, pero a medida de que avanza se vuelve más un reírse con ellos que de ellos y gran parte como una reivindicación.

La dirección de actores es excelente, en particular con la consistencia del acento sureño, todos los actores lo mantienen muy bien. Especialmente destacable es la labor de Daniel Craig, conocido por su acento británico.

La película consta de varias vueltas de tuerca bastante sorprendentes, lo que parece en principio una película con una trama sencilla, se vuelve mucho más compleja y embarca a la audiencia en un viaje desopilante repleto de momentos cómicos y tomas bastante exóticas para el género.

por Daniela Barri