The Food Combat es un ciclo pensado para que chefs de distintas partes del mundo intervengan la cocina de Aramburu.
En este combate de sabores, recibirán a reconocidos chefs y proveerán de los mejores productos locales para que con su creatividad y talento, improvisen juntos, un menú para una noche única.
En esta edición The Food Combat fusiona cuatro corrientes gastronómicas recibiendo a renombrados chefs de Latinoamérica.
Gonzalo Aramburu, como anfitrión, invita a Ivan Ralston de Tuju (San Paulo) con dos estrellas Michelin; Jorge Muñoz, nuevo chef de Astrid & Gastón (Lima); Kurt Schmidt e 99 Restaurante (Santiago De Chile)
Acompaña el evento los vinos DV Catena de Catena Wines.
Martes 10 de marzo – 19h – Aramburu.
Vicente López 1661, Pasaje del Correo – Recoleta – Buenos Aires.
Información : (+5411) 4811-1414
Reservas a través de aramburu.meitre.com
GONZALO ARAMBURU
Se formó en el Instituto de Instituto Argentino de Gastronomía (I.A.G), continuó sus estudios en Europa y Estados Unidos, en restaurantes de dos y tres estrellas Michellin y cocinas notables como las de Charlie Trotter, Daniel Boulud, Martín Berasategui. Se perfeccionó en L’École Lenôtre Paris.
En 2007 abre el restaurante Aramburu en Constitución, un barrio atípico para el nivel de la cocina que comienza a desarrollar. Allí empieza a desarrollar un un menú en pasos, único y estacional. Una experiencia que lleva seis años consecutivos dentro de los primeros lugares de la guía de los 50 mejores Restaurantes de Latinoamérica.
En el 2013 inauguró BIS a metros del original, con una propuesta más informal articulando el lado cotidiano de la gastronomía y comenzando un proceso de madurez y estabilidad. En 2018 muda “BIS” al pintoresco Pasaje del Correo, en el barrio de Recoleta, y reabre sus puertas con una propuesta totalmente renovada. En 2019 completa la mudanza de Aramburu, de modo de tener su restaurante y su bistró uno frente al otro.
IVAN RALSTON
Un cocinero inquieto y creativo que crea platos inspirados y armoniosos, aplicando una técnica refinada a los ingredientes brasileños.
Nació en una familia que mantiene una relación intrínseca con la comida: sus padres, Roberto y Liane Bielawski, son los socios fundadores del exitoso Ráscal . Aun así, el acercamiento de Ivan al universo de la cocina no fue inmediato.
Estudió música, antes de decidir, a los 20 años, que lo que realmente quería era ser cocinero. Trabajó durante dos años en el restaurante Maní y se mudó a España, donde pasó las estrellas El Celler de Can Rocca y Mugaritz. En Japón, fue internado en RyuGin en Tokio.
De regreso en Brasil, Ivan se unió a otros cinco socios y abrió, en julio de 2014, Tuju, en Vila Madalena, en San Pablo, que cuenta con dos estrellas Michelin.
JORGE MUÑOZ
Estudió cocina en Barcelona, ciudad a la que migró junto a su familia cuando era un adolescente, dejando atrás su querido norte peruano. Allí su arduo trabajo lo llevó a dirigir Patka, el proyecto de cocina nikkei de los hermanos Adrià que fue un éxito de tal nivel que les otorgaron una estrella Michelin, uno de los galardones gastronómicos más importantes. Pero el corazón de Jorge tenía una deuda pendiente con nuestro país y su cocina. Por ello, luego de 19 años, regresó al Perú sin trabajo, pero con la convicción de querer cocinar en su tierra y reencontrarse con sus sabores.
Desde marzo del año 2019, está a cargo de la cocina de Astrid y Gastón, un reto que le ofreció Gastón Acurio y que aceptó con entusiasmo. Tiene total libertad creativa, por lo que ha renovado la carta bar, el menú degustación y la carta del restaurante.
KURT SCHMIDT
Con poco más de un año ( 2015), su restaurante fue nombrado el 46 mejor de Latinoamérica en la lista elaborada por el consorcio italiano San Pellegrino: uno de los rankings más importantes del mundo. En Providencia, el local se llama 99, y su filosofía incluye cultivar sus propios vegetales, la recolección de desechos en la Vega Central y el contacto directo con peque?os proveedores de todo Chile.
La carrera de Kurt como cocinero comenzó después de dejar atrás seis años de ingeniería comercial y, con 25 años, llegar a hacer una pasantía al premiado Boragó. Luego partió a Europa, donde trabajó en cocinas como la del danés Noma, el mejor del mundo según los rankings más importantes. Unos años después volvió a Chile para formar un colectivo gastronómico y abrir el aplaudido 99. Ahora, además, quiere crear una fundación que se dedicará a enseñar y promover una buena alimentación entre niños de escasos recursos.