Antares nació como un emprendimiento hobbista de tres amigos en un garaje marplatense y aún mantiene intacta esa pasión que la lleva a ser una cervecería innovadora y disruptiva, con planes de seguir creciendo en la escena nacional e internacional.
Antares, la cervecería artesanal e independiente que nació como un emprendimiento hobbista de tres amigos marplatenses en un garaje, cumple 25 años de historia en un marco de innovación constante que la llevó a ser pionera en el rubro y a cambiar radicalmente la escena de la industria artesanal en la Argentina, hasta convertirse en un referente indiscutido que se busca seguir desafiando y abrir nuevos caminos en un sector ecléctico y cambiante como lo es el de la cerveza artesanal nacional.
El proyecto nació de la mano de Mariana Rodríguez, Leo Ferrari y Pablo Rodríguez, tres amigos que en 1998 apostaron fuerte al desarrollar un concepto inédito y disruptivo en nuestro país y montaron en la calle Córdoba de Mar del Plata un bar con una fábrica de cerveza anexada, algo que a nivel mundial se conoce como Brewpub pero que en la década del ́90 era un formato casi desconocido en estas latitudes.
“Decidimos abrir un lugar donde la gente pueda ir a tomar la cerveza, conocerla y en el que nosotros mismos pudiéramos explicarles cómo era, porqué tenía ese color y sabor natural, sin aditivos: creo que esa fue la base del éxito”, reconoce Leo Ferrari, cofundador de Antares.
En esos tiempos la cerveza artesanal era aún muy incipiente en Argentina y apenas existían dos cervecerías en el rubro: una en El Bolsón (hoy extinta) y la otra en Bariloche, por lo que se puede considerar a Antares como pionera en el país a nivel histórico.
Al ser todo muy nuevo y poco estandarizado no existía en ese momento un consenso acerca de qué receta utilizar o qué equipos eran los mejores para elaborar cerveza artesanal, por lo que Antares hizo camino al andar: “Tuvimos que aprender de cero a hacer procesos como el pasteurizado, el llenado de barriles y botellas, el etiquetado y cómo servir la cerveza. Incluso inventamos choperas, canillas y diseñamos nuestros propios tanques en un mercado que estaba totalmente virgen en Argentina”, destaca Pablo Rodríguez, cofundador de Cervecería Antares.
Luego de ese exitoso puntapié inicial, y tras superar con bastante esfuerzo la crisis de 2001, Antares comenzó a tener presencia en varias provincias a través de la distribución de sus botellas y por primera vez en 2005 desembarcó con dos bares cerveceros fuera de Mar del Plata en las ciudades de La Plata y Tandil.
Ambos locales fueron un éxito rotundo y los fundadores se dieron cuenta que el camino de crecimiento de la marca se lograría a través de un desarrollo federal. Hoy, gracias a esa receta, Antares tiene más de 60 bares en todo el país sin resignar su condición de cervecería independiente, mientras que en Mar del Plata cuenta con siete locales: Primer Antares, Güemes, Playa Grande, Constitución, Biología, Faro y Bar de Fábrica.
La Fábrica de 12 de Octubre que se volvió el BDF
Ese marco de crecimiento le exigía a la cervecería contar con un nueva planta y así surgió la Fábrica 12 de Octubre, en la que la producción comenzó a crecer exponencialmente y le permitió a Antares lograr una llegada contundente a nivel nacional con todos sus productos.
Ese lugar también se volvió una especie de “templo” en el que Leo, Pablo y Mariana lograron mantener vivo su espíritu hobbista y jugaron con distintas creaciones que luego se convirtieron en cervezas fundamentales de Antares. Incluso allí nació el famoso Proyecto Barricas desarrollando una línea de cervezas de guarda con estilos como “El Centinela Roble” (Barley Wine) y “Monasterio” (Belgian Quadrupel).
En 2013 abrió ahí mismo el Bar de Fábrica, que hoy cuenta con 25 canillas propias y en el que se comparte la cultura cervecera con distintas actividades abiertas al público como cocciones colaborativas, charlas, catas y visitas guiadas que permiten conocer de cerca el proceso de elaboración de la cerveza artesanal.
La Fábrica del Parque y la Planta Piloto
El crecimiento sostenido provocó que en 2017 Antares tenga que sumar una “nueva casa” a la familia y abrió su Fábrica del Parque, que está ubicada en el Parque Industrial Mar del Plata y con la que logró ampliar su capacidad de producción. En este lugar funciona una Planta Piloto en la que se innova en nuevos estilos como las “Bombas de Lúpulo” y un laboratorio de última generación que permite asegurar la calidad del producto terminado y que el mismo llegue en óptimas condiciones a todo el país.
Hoy Antares produce seis millones de litros anuales y cuenta con una distribución rápida y eficaz en todo el país. Además, continúa con su plan de expansión: acaba de inaugurar un nuevo local en Santa Rosa, La Pampa, y a fin de año se viene la apertura de un local en el tradicional mercado de San Telmo de la Ciudad de Buenos Aires.
También tiene previsto desembarcar en el exterior del país con todo el conocimiento cervecero que la marca ha ido adquiriendo a lo largo de este cuarto de siglo: “En general a los hobbistas no nos gusta hacer siempre lo mismo, vamos tanteando. Hay tantas cosas para probar. Lo importante es desafíarse. Hay que hacer cosas desde adentro, y como te salgan y eso es lo que hicimos desde nuestros comienzos. Este espíritu late fuerte en nosotros y es el que se terminó transformando en un atributo: si no innovás no sos una cervecería artesanal”, destaca Mariana Rodriguez en sintonía.
Un Antares del futuro con la misma pasión
Actualmente, Cervecería Antares se encuentra trabajando con una visión a largo plazo pensando en los próximos 10 años de la marca y poniendo en el corazón del negocio a los consumidores, que son cada vez más exigentes y que han instaurado nuevas y distintas ocasiones de consumo.
En ese contexto, el principal desafío pasa por lograr adaptarse a un mercado ecléctico y en constante cambio, en el que existe una mayor oferta de experiencias que compiten directamente con la industria cervecera.
Es el caso de su más reciente lanzamiento en lata, +Lúpulo Sin Alcohol: se trata de una cerveza 0%, una Session IPA muy lupulada que se produjo en el contexto de una mayor demanda de productos saludables y con menos calorías por parte de los consumidores, algo que ocurre en la Argentina y en el resto del mundo.
También te podría interesar
Festejá San Patricio con la “Pinta de la Suerte” de Cervecería Antares
“Pasión por lo que hacemos desde 1998”, la primera campaña de Cervecería Antares
Cervecería Antares obtuvo el oro en 2 estilos en la primera competencia internacional del año
Cervecería Antares llega a uno de los destinos favoritos de la Costa Atlántica Argentina
Antares festeja el Oktoberfest con una cerveza especial que homenajea a la cultura alemana